¡Ay! ¡Juguemos, hijo mío,
a la reina con el rey!
Este verde campo es tuyo.
¿De quién más podría ser?
Las oleadas de la alfalfa
para ti se han de mecer.
Este valle es todo tuyo.
¿De quién más podría ser?
Para que los disfrutemos
los pomares se hacen miel.
(¡Ay! ¡No es cierto que tiritas
como el Niño de Belén
y que el seno de tu madre
se secó de padecer!)
El cordero está espesando
el vellón que he de tejer.
Y son tuyas las majadas,
¿De quién más podrían ser?
Y la leche del establo
que en la ubre ha de correr,
y el manojo de las mieses
¿de quién más podrían ser?
(¡Ay! ¡No es cierto que tiritas
como el Niño de Belén
y que el seno de tu madre
se secó de padecer!)
¡Sí! ¡Juguemos, hijo mío,
a la reina con el rey!
Gabriela Mistral
:)
ResponderEliminarAmigo sinBalas, me alegra de haberte reencontrado, si no me reconoces con esta foto, soy Leo el autor del blog egomanias.
ResponderEliminarSi no te lo había dicho, te lo digo ahora, adoro la poesía de Gabriela Mistral.
Un fuerte abrazo.
Leo
Jo, amiga gracias por seguirme
ResponderEliminarEgomanías, sono tornato senza gloria ma con maestà, vi ringrazio per l'adesione del mio gruppo
ResponderEliminarSpero di crescere